Lección

febrero 22, 2010

Y ahí estábamos. Yo de resaca, tú martirizándome. En el fin del mundo. En frente, el mar. Las olas se rompían contra el muro dando lugar a caprichosas figuras de agua. El cielo, más alto que nunca, quizá quería avisarnos del futuro que nos aguardaba mediante sus tonos grisáceos, y el silencio era tan alto que hacía incluso que me dolieran los oídos.

En realidad, no sabía a ciencia cierta si lo que hacíamos era algo normal. Quiero decir, no creo que mucha gente se haya visto alguna vez en una situación semejante, pero, qué es lo que harían? Y, acaso era lo correcto? No lo creo.

Seguí mirando al mar un rato más. Me pareció ver como una gaviota descendía hasta el agua y sin más, se zambullía como si fuera un sucio pato o una oca majestuosa como las que había en el estanque municipal. Me gustaban las ocas. Estuve mirando un rato más aunque en realidad, hacía tiempo que había dejado de ver.

Sólo pude acordarme de la vez en la que comenzó el idilio. Recuerdo haber corrido calle abajo, de noche, esquivando a gente ebria y a vagabundos varios con un solo objetivo: tú. Nunca te lo dije, pero había bebido. Claro que, me imagino, tú ya lo habrías imaginado. Corrí y por primera vez no era para huir. Llegué a tu casa, cogí esa piedra y la lancé con todas mis fuerzas. Se estampó contra el conducto de ventilación del bar de debajo de tu edificio. Sin embargó realicé un segundo lanzamiento perfecto y la piedra impactó en tu ventana. Te acuerdas?

Y ahora todo se había esfumado. Simplemente, había desaparecido. Era un tópico, un se puede decir que se trataba de un caso típico a la vez que atípico, pues las circunstancias no eran para nada usuales. Las circunstancias no, pero el final era el de siempre. No era la primera, ni sería la última vez. Quién no ha sentido con una mueca de desgana el sabor de la derrota?

Lo único que me consolaba era imaginar que detrás de sus gafas estilo Bob Dylan intuía un par de lágrimas. Seguramente eran fruto de mi imaginación. Siempre fuiste y serás una auténtica zorra. Mi zorra.


T Shirt WAR

febrero 21, 2010

Como mola el stop-motion.

+ making off


15 M

febrero 10, 2010

Subiza


e n d

febrero 7, 2010

Al fin y al cabo, no fuimos más que objetos de paso en la vida de los otros. Fuimos risas, fuimos cervezas, charlas y momentos. Quizás, en el fondo, no fuimos más que protagonistas y personajes de reparto de multitud de historias.

Fuimos una época. Mera coincidencia. Resultado de decisiones, de burocracia y de los caminos de nuestras respectivas vidas. Fue una estación, una escala más de este largo camino.

Fuimos sentimientos, felicidad. Fuimos lágrimas y emociones. Fuimos nuevos, viejos, de paso. Llegamos. Vivimos. Nos fuimos.

Canciones, anécdotas, cosas que sólo nosotros comprendimos y comprenderemos. Tonterías y abrazos.

Y aunque así parezca simple, y frío. No lo es. Pues somos seres humanos. Y nació el cariño, y cosas de sentimientos difíciles de comprender para alguien frío y seco. Y seremos recuerdos. Y sonrisas. Y melancolía.

Fuimos únicos e irrepetibles. Porque todo es único e irrepetible.

Estuvo bien. Adiós y buena suerte!